Utilizar organizadores vs. No utilizar organizadores en tu cocina
Los
organizadores de cocina
son objetos y piezas muy prácticas que, gracias a su diseño, tamaño y ubicación, permiten separar, organizar, guardar y agrupar tanto elementos orgánicos como no orgánicos
que componen lo más fundamental de tu área de cocina. Así, por ejemplo, si estás preparando una cena con platos elaborados o trabajosos y te ves en la necesidad de usar varios ingredientes así como de manejar diferentes herramientas, la falta de separadores puede hacer que alistar tu cena se convierta en un proceso difícil, caótico e incluso engorroso. Por el contrario, si cuentas con los organizadores adecuados, las actividades de cocina no solo se realizarán de una forma más fácil sino que además habrá mayor limpieza, rapidez y sobretodo un mayor disfrute del acto mismo de cocinar.
Recuerda que dentro de las tendencias más actuales se valora mucho el orden y la limpieza. Es más, se habla de los cleanfluencers como personalidades que, más allá de sus consejos de limpieza, organización y bienestar, hacen palpable una característica de nuestra época: vivimos un tiempo en el cual casi cualquier aparato o estancia es susceptible de un reordenamiento según objetos específicamente diseñados con dicho fin.
Así, la gran variedad de organizadores para cocina permite mejorar cada elemento de tu experiencia a la hora de cocinar o de arreglar o guardar víveres y complementos. Un ejemplo son las pilas de platos hondos que tienen que levantarse cuando quieres alcanzar los platos llanos. Una solución sencilla al problema es usar un organizador de metal con tres alturas para colocar los plato en función de su dimensión y forma. Estos separadores pueden ajustarse a cualquier superficie e incluso pueden funcionar mejor en alguno de los rincones de tu cocina.
Si tu cocina no es lo suficientemente grande como te gustaría, aprovechar cualquier espacio se vuelve fundamental. ¿Es posible hacerlo manteniendo el exterior despejado y sin tener que aumentar nuevos elementos a un espacio ya reducido? No contar con
organizadores colgantes
interiores puede significar un amontonamiento de objetos en tu cocina. Este tipo de organizadores pueden colgarse de la puerta de un armario y en su interior pueden ponerse los utensilios que debes tener siempre a mano como, por ejemplo, tablas de cortar hasta recipientes con aceite o vinagre.
Los organizadores de cubiertos suelen ser muy útiles, de hecho son los más utilizados en cocinas alrededor del mundo. No contar con este organizador puede hacerte perder mucho tiempo en la preparación de tus comidas, así como en la organización general de este espacio tan importante del hogar. Lo interesante es que para hallar un buen organizador de cubiertos hoy existen muchas opciones tanto en tamaños y diseños como en materiales: existen organizadores ampliables así como de materiales como
madera de bambú
.
Es muy posible que lleves años guardando tus sartenes en un cajón, que se encuentren ahí apilados uno encima de otro. No obstante, existen sistemas capaces de facilitar su visibilidad, acceso y manejo. Estos organizadores sirven para ordenar tanto sartenes de distintos tamaños así como tapas de ollas y cacerolas. Incluso existen algunos que pueden colocarse sobre el fregadero o en el interior de armarios, despensas o cajones.
Existen además especieros de diferentes materiales e incluso giratorios para quienes aman la variedad de sabores, así como soportes apilables para ordenar botellas y organizadores para rollos de papel y huevos. Tener localizado en un mismo espacio el aluminio, papel de cocina y el filme transparente puede resultar muy provechoso. No solo que esto permite deshacerse de las cajas y de la dificultad de acceso al producto que pueden implicar, sino que además pueden ayudar a un mejor corte y aprovechamiento de cada producto. Por otro lado, existen hueveras (tanto para guardarlos refrigerados como en el exterior) para todos los gustos y hecho de muchos materiales distintos como, por ejemplo, porcelana en el caso de que apoyes la eliminación de plásticos.
Asimismo, no usar organizadores dificulta el manejo y manipulación de verduras y frutas. No solo que esto entorpecería la organización del espacio, los separadores de alimentos (con tapa de cierre hermético o no) hacen posible un manejo limpio de los alimentos y con una organización que facilita todos los procesos de la cocina: almacenamiento, acceso, cocinar y limpieza.
Una de las diferencias esenciales al momento de comparar el uso o no uso de organizadores es la disposición espacial. Disponer de un espacio de almacenaje no es tan fácil como parecería en un principio. Por ejemplo, aprovechar el área que suele existir debajo del fregadero en las cocinas puede ser una de las mejores opciones. En este sitio se pueden ubicar productos y accesorios de limpieza e incluso objetos más voluminosos. Para todos estos casos, existen
organizadores
, pueden ser ajustables con varias opciones de altura y niveles en distintos materiales como acero inoxidable o con baldas de plástico.